Apuntarse al paro es uno de los requisitos que hay que cumplir obligatoriamente cuando se quiere acceder a la prestación por desempleo. Pero puede ser muy útil sellar el paro incluso en aquellos casos en los que no existe derecho a cobrar el paro o el subsidio, o ya se han agotado las prestaciones.

Estos son algunos de los motivos por los que conviene sellar el paro aunque no se esté cobrando subsidio:

Para obtener ayudas económicas

A nivel estatal existen diferentes ayudas de carácter económico que garantizan el poder cobrar un subsidio aunque sea mínimo. Algunos ejemplos son la Renta Activa de Inserción, el subsidio para mayores de 52 años y el subsidio extraordinario por desempleo.

En estos casos uno de los factores que valora la Administración es la antigüedad de la inscripción como parado. De ahí la importancia de no darse de baja si se sigue sin empleo, ya que se perdería la antigüedad.

Poder disfrutar de las prestaciones de sanidad pública

El acceso a la sanidad pública gratuita está condicionado a la cotización. Pero también se reconoce a aquellas personas que estén sin cotizar por hallarse en situación por desempleo.

Mantener la inscripción es, por tanto, la mejor forma de asegurarse de que se tendrá asistencia sanitaria sin ningún coste añadido.

Conseguir ventajas fiscales o económicas

Quienes están inscritos en el paro pueden solicitar en cualquier momento al SEPE un certificado que acredite que están en situación de desempleo, documento que puede servir para conseguir una exención de las tasas en los procesos púbicos de oposición, para acceder a becas e incluso para tener derecho al Bono Social Eléctrico.

Tener formación gratuita

Uno de los objetivos del SEPE es mejorar la empleabilidad de los inscritos. Por eso todos ellos tienen derecho a participar en cursos de formación e incluso de reciclaje profesional sin tener que pagar nada por ello. 

Orientación laboral

En el caso de algunas personas la búsqueda de empleo se complica todavía más por no tener conocimientos sobre aspectos básicos como la elaboración de un currículum o el tipo de empresas que pueden demandar su perfil profesional. 

Mientras se está inscrito en el paro se tiene derecho a recibir asesoramiento y orientación laboral por parte de expertos, lo que ayuda a encontrar un empleo más fácilmente.

Recibir ofertas de empleo

No hay que olvidar que el SEPE es también un lugar de búsqueda de empleo. Al renovar la demanda se tiene acceso a las ofertas de empleo que las empresas hacen llegar a esta entidad, por lo que se puede participar en más procesos de selección.

Preferencia para ser elegido en los Planes de Empleo

Los Planes de Empleo puestos en marcha por Ayuntamientos y Comunidades Autónomas ofrecen a los desempleados la oportunidad de ganar experiencia laboral. Uno de los factores que se tienen en cuenta a la hora de hacer la selección de los participantes es la antigüedad en el paro.

Tener mayor probabilidad de ser contratado

La contratación de personas desempleadas suele tener ciertas bonificaciones e incentivos para las empresas, lo que hace que estas estén más interesadas en contratar a alguien inscrito en el paro que a otra persona que no lo esté.

Facilitar el acceso a la pensión de viudedad

Para que el cónyuge de un fallecido pueda cobrar la pensión de viudedad es necesario que su marido o esposa estuviera de alta en la Seguridad Social o en situación asimilada al alta en el momento del fallecimiento.

La inscripción en el paro es una situación asimilada al alta, por lo que en caso de fallecimiento el cónyuge supérstite puede acceder a la pensión.

De la inscripción en el paro se derivan muchos beneficios a diferentes niveles, por eso conviene seguir apuntado mientras no se encuentre un empleo.

¿Por qué conviene sellar el paro aunque no se esté cobrando subsidio?