El pasado mes de marzo, con el decreto del estado de alarma y el confinamiento, se suspendió inmediatamente todo tipo de formación presencial, lo que afectó a un gran número de empresas y trabajadores (tanto en activo como en situación de desempleo) que estaban en proceso de formación o pensaban hacer un curso en las siguientes semanas.
El 28 de abril el Consejo de Ministros adoptó el Plan de transición hacia la nueva normalidad, y dentro de las medidas previstas estaba el restablecimiento de la formación presencial, siempre minimizando los posibles riesgos para la salud.
Recuperación de la formación impartida en centros formativos
El SEPE también imparte cursos a través de diferentes centros de formación con los que ha llegado a acuerdos. Mientras los territorios estén en Fase 2 o superior se puede impartir formación presencial en este tipo de centros, siempre con el correspondiente respeto a las medidas de higiene y prevención.
En este sentido, se harán ajustes en las aulas para garantizar la distancia de seguridad interpersonal y la protección tanto a nivel individual como colectivo.
Programas públicos de empleo, Escuelas Taller, Casas de Oficios y Talleres de Empleo
El SEPE imparte formación a través de diferentes modalidades según los destinatarios de la misma. Entidades como las Escuelas Taller y las Casas de Oficios pueden recuperar ya la formación presencial. Sin perjuicio de que, como en todos los casos anteriores, tengan que hacer algunos ajustes en cuanto a número de alumnos por aula para garantizar la seguridad de todos los asistentes.
Lo mismo ocurre con los planes de formación centrados en la capacitación para el desarrollo de la negociación colectiva y el diálogo social.
La recuperación de la formación presencial en estos ámbitos es un paso más hacia la normalidad que además servirá para desarrollar nuevos protocolos más seguros que se podrán aplicar incluso en otras enseñanzas como la enseñanza primaria y la secundaria.
Formación presencial en empresas
Aquellas empresas que ya hayan recuperado su actividad, sea de forma total o parcial, pueden retomar también la formación presencial en sus propias instalaciones a sus empleados, siempre que dicha formación sea necesaria para la correcta continuación de los procesos productivos.
Se pondrá especial cuidado en el mantenimiento de las medidas de higiene y seguridad para prevenir el riesgo de contagio.
Aquellas empresas que estuvieran dando formación a sus empleados y esta se viera interrumpida por el estado de alarma, tienen un plazo de dos meses para retomar la misma.
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